Brasil está en camino de romper récords con su cosecha de granos 2024/25, según la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab). Se estima una producción total de 332,9 millones de toneladas, lo que representa un aumento de 35,4 millones de toneladas respecto al ciclo anterior. De confirmarse, sería el volumen más alto registrado en la serie histórica de Conab.

La superficie cultivada también crecería un 2,2%, alcanzando los 81,7 millones de hectáreas, mientras que el rendimiento promedio se recuperaría un 9,5%, con una proyección de 4.074 kilogramos por hectárea.

La soja encabeza el crecimiento, con una cosecha estimada en 168,3 millones de toneladas—la mayor jamás registrada en Brasil. La recolección ya está prácticamente finalizada en gran parte del país, incluidos el Centro-Oeste, Sudeste, Paraná y Tocantins. Estados como Minas Gerais, São Paulo, Goiás, Mato Grosso, Bahía, Rondônia y Tocantins registraron rendimientos récord, gracias a condiciones climáticas favorables y al alto nivel de profesionalismo de los productores.

El maíz también se destaca esta temporada. La producción total se estima en 126,9 millones de toneladas, un incremento del 9,9% respecto a 2023/24. La primera cosecha está completada en un 77,6%, con una producción esperada de 24,7 millones de toneladas. La segunda cosecha ya fue completamente sembrada y se espera que rinda unas 99,8 millones de toneladas. El clima se ha mantenido favorable, especialmente durante etapas críticas como la floración y el llenado de granos.

Pronóstico 2025/26 para EE.UU.: más maíz, menos soja en medio de un nuevo acuerdo comercial

Mientras tanto, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) publicó sus proyecciones para 2025/26 en su informe mensual de mayo del WASDE (Estimaciones de Oferta y Demanda Agrícola Mundial), anticipando una cosecha récord de maíz en un contexto de realineamiento del comercio global.

El USDA estima que la producción de maíz en EE.UU. alcanzará los 15.820 millones de bushels en 2025, un aumento del 6% respecto a 2024 y ligeramente por encima de las expectativas del mercado. El anuncio coincidió con una desescalada temporal de aranceles entre EE.UU. y China, anunciada por la administración del presidente Trump, tras meses de tensiones comerciales.

En contraste, el panorama para la soja es más moderado. Se proyecta una producción de 4.340 millones de bushels, levemente inferior debido a una menor superficie sembrada. Sin embargo, se espera un aumento en la demanda de molienda de soja de 70 millones de bushels, impulsada por el incremento en la producción de carne de cerdo y pollo, así como por una mayor demanda de aceite de soja para biocombustibles.

El uso de aceite de soja para biocombustibles podría alcanzar los 13.900 millones de libras, mientras que el precio promedio estacional de la soja se espera que suba a 10,25 dólares por bushel—desde los 9,95 dólares en 2024/25. También se prevé un alza en los precios de la harina y el aceite de soja, que alcanzarían los 310 dólares por tonelada corta y 46 centavos por libra, respectivamente.

Según el nuevo acuerdo arancelario, EE.UU. aplicará un arancel base del 30% sobre la mayoría de las importaciones chinas hasta agosto, mientras que China reducirá su arancel base para importaciones desde EE.UU. al 10%. Estas tasas representan una importante reducción respecto a los máximos anteriores del 145% y 125%.