A medida que la acuicultura se expande en África, los productores de alimentos para peces enfrentan desafíos crecientes en la obtención de ingredientes clave como el maíz y la harina de soja, lo que impulsa la exploración de soluciones alternativas, incluidas fuentes de alimentación no convencionales, para garantizar la sostenibilidad y rentabilidad a largo plazo.
La empresa egipcia Proteina está recibiendo apoyo del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) y la Unión Europea para expandir la producción de proteína a base de insectos.